Takeda, el jefe del departamento es educado y amable. Pero de repente el tren Shinkansen tuvo que parar porque el sistema eléctrico se rompió, Karen y el gerente se vieron obligados a alquilar un hotel y quedarse aquí. Como no podía volver a casa, su pareja siguió emborrachándose, lo que provocó que Karen se quedara dormida y Takeda la llevara al hotel. Su novio estaba muy molesto y llamó, pero quien respondió la llamada de Takeda estaba aún más cansado. Al regresar al hotel y ver que Takeda nunca se irá, le dice que averigüe que solo hay una habitación, por lo que la habitación estará con ella esta noche. Sabiendo que algo andaba mal, antes de que pudiera hacer algo, el gerente se apresuró a follársela y eyaculó sobre ella. Cuando terminó, la abofeteó una y otra vez sin parar. Estar desnudo toca un lugar profundo que el amante no puede alcanzar, el placer de ser besado continuamente, poco a poco hace que el hombre se olvide de todo.